¿Cómo lavar una tienda de campaña?
Consejos como lavar tienda de campaña
Llegó el momento; acabamos de terminar nuestra increíble acampada, toca volver a casa, y con ello limpiar la tienda de campaña que ha sido nuestro pequeño hogar portátil durante unos días, y aunque este plan no es precisamente el más apetecible, es una tarea vital si queremos mantener nuestra tienda de campaña en un óptimo estado para futuras acampadas.
Entendemos que la tarea de cómo lavar una tienda de campaña es de lo menos interesante, pero créenos cuando te decimos que es de vital importancia que se realice con sumo cuidado si nuestra intención es disfrutar de ella durante muchos años. En contra de las creencias comunes, y debatiendo a ese grupo de personas que quieren realizar la limpieza lo antes posible, debemos decirte que está terminantemente prohibido meter nuestra tienda en remojo, darle con la manguera y, mucho menos, secarla con el secador, ya que con ello sólo conseguiremos dañar las infraestructuras y los materiales.
En contraposición, y contando con que el cómo lavar una tienda de campaña es algo que no requiere de mucho esfuerzo, aquí te contamos tres pasos básicos para que nuestra tienda se quede completamente lista para la siguiente aventura:
Pasos y consejos para lavar tu tienda de campaña
- El primer paso, y sin duda alguna el más fundamental y básico, es que antes de hacer nada barramos y aspiremos bien todas las superficies para eliminar no solo el polvo, sino también los posibles bichitos que se nos hayan quedado dentro, ya que si no lo hacemos corremos el riesgo de que puedan poner huevos. Una buena recomendación es que uses un cepillo más pequeño para eliminar la suciedad de las esquinas y los pliegues.
- El segundo paso, y el que requiere más tiempo, consiste en llenar un cubo con agua templada o agua fría y disponer de una esponja de microfibra, la cual debe ser lo más suave posible, para poder limpiar en profundidad todas las superficies de nuestra tienda. Es de vital importancia que todos los materiales que utilicemos estén constantemente limpios para evitar la transferencia de suciedad, por eso cuando escurras tu esponja no la retuerzas, simplemente presiónala con las manos para eliminar los residuos y seguidamente enjuágala con agua limpia.
- El tercer y último paso es dejar secar la tienda al aire libre. En muchas ocasiones, para que el secado sea lo más efectivo posible, lo más recomendable es volver a montar la tienda y dejarla en un espacio libre de suciedad adyacente, como pueden ser los garajes o centros de plantas. Recuerda que, para poder guardarla, nuestra tienda tiene que estar completamente seca, por lo que debes comprobar cada cierto tiempo las costuras, ya que son las partes más complicadas.
Aunque el proceso de cómo lavar una tienda de campaña sea sencillo, recuerda que requiere de tiempo y dedicación si nuestra intención es poder utilizar nuestra casa portátil en futuras aventuras, por ello te recomendamos que realices esta tarea en un entorno tranquilo y cuando seas consciente de que dispones del tiempo suficiente para proceder siguiendo los pasos correctamente y evitando los típicos errores que te hemos traído en este post.